Olivia Rodrigo es una artista atípica: su estilo es muy musical es muy noventero, sus letras son ‘explícitas’ pese a ser una estrella Disney y ha logrado fama y prestigio (en muy poco tiempo) a tandas iguales; aun así, muchos la han comparado con Taylor Swift. Estas similitudes vienen porque en más de una ocasión, la cantautora de origen filipino ha confesado su admiración por Swift, utilizó el sample de New Year’s Day (canción perteneciente a Reputation) para uno de los temas de su álbum y ha escrito canciones que, en su mayoría, se especula son sobre su tumultuosa relación con Joshua Basset, algo que caracterizó a Taylor Swift en sus primeros álbumes (componer canciones sobre sus relaciones sentimentales). Con todo esto sucediendo, nos llegó SOUR de Olivia Rodrigo, uno de los mejores álbumes de 2021 que podría terminar de consagrar a la cantante, si acaba ganando Mejor Álbum del Año en los Grammy.
Hace una década Taylor Swift cantaba sobre el desamor pero, de alguna manera se las arreglaba para sonar siempre optimistas, algo que probablemente caracterizó a los millenials en su adolescencia (antes todo era mejor, de allí el apego de esta generación a la nostalgia); sin embargo SOUR es puro dolor (de allí el título, traducido como ‘amargo’), Olivia Rodrigo está cansada de muchas cosas, tal como lo canta en el primero track del disco, Brutal, y no es casualidad que este sea el tema que abre el álbum. SOUR es la exponencia perfecta de esa mirada agría de los adolescentes de esta década, no solo sobre el amor y las relaciones, sino sobre la vida en general; algo que ya habíamos visto muy bien reflejado en Euphoria.
SOUR de Olivia Rodrigo: un grito amargo pero casi perfecto
Desamor, celos, orgullo, ira, tristeza, ansiedad. Así podemos describir los sentimientos que se viven en la adolescencia pero también todos y cada uno de los temas de SOUR. Porque el álbum debut de Olivia no hay un tema alegra. Ninguno. De hecho, bastante intencional es que los primeros acordes de Brutal sean unas melodiosas cuerdas y de repente ella diga “Quiero que sea, como, desordenado” y empieza un sonido más pesado, bastante punk-rock noventero con frases en la letra como: “Estoy cansada de los diecisiete/dónde está mi sueño adoelscente. Si alguien más dice `disfruta tu juventud´ voy a llorar. Estoy ansiosa y nerviosa, anda puede ayudar”. Con Brutal se permite ampliar su alcance y situar el disco en el huracán que es la adolescencia. Más adelante el punk-rock no está tan presente pero cada vez que la cantante recurre a este (aparentemente influenciada también por Paramore, el álbum crece).
SOUR muestra una variedad de emociones, pero Olivia prefiere las baladas y los tiempos medios para expresar estos sentimientos, lo que disminuye la adrenalina que impregnan los primeros temas; a pesar de que hay muchas baladas, el ritmo del álbum no se pierde.
Además, la secuencia es perfecta; Olivia se mueve rápidamente a través de las fases del duelo, en este caso motivado por una fracasada relación amorosa. Por ejemplo, en Traitor y Driver License, Olivia habla de cómo termino todo, no lo llama ‘ruptura’ pero nos explica cómo sucedieron las cosas (básicamente él termina con ella de forma abrupta y dos semanas después anda con otra chica). Las pistas se inclinan más a la balada, al tiempo que también va dejando atrás lo difícil de ser adolescente para enfocarse más en el desamor.
Cuando se estrenó Driver License, empezaron las comparasiones con Taylor Swift. Tiene sentido que la canción que sigue a «licencia de conducir» en el álbum interpola una pista de Taylor Swift. Construido en torno a una interpolación de la melodía del piano de New Year’s Day, Olivia empieza a meditar sobre lo que estaba mal en la relación desde un comienzo (“Era el amor de tu vida hasta que me enojaba”). De esta manera, proporciona más contexto para los eventos que llevaron a la caída de la relación. Además, el segundo verso de esta pista es puro Taylor Swift, y funciona maravillosamente: «Y tal vez de alguna manera masoquista / Me parece todo emocionante / Me gusta, ¿quién serás hoy?«.
En Deja vu inicia la fase del enfado, Olivia no está para nada contenta con el hecho de que él (su ex) en su nueva relación, recurra a las mismas cosas que hacía con ella (“Le cuentas los chistes que yo te conté”) pero empieza la fase de la negación donde ella se da cuenta que, tal vez, terminar con este chico, fue lo mejor.
La mitad posterior de SOUR dedica su tiempo a dar cuerpo a la negociación y aceptación. Good 4 u, es Olivia desde la ironía, cantándole a su ex amor, deseando que le vaya bien, pese a que quizás es él quien saldrá perdiendo tras la ruptura. Con letras que recuerdan la era de Fearless de Taylor Swift, Olivia ofrece su interpretación vocal más efectiva en en Enough for you, analiza cuanto se esforzó por mantener en pie una relación y aun así nada le parecía bien al chico, tal vez porque en realidad nada le satisface a él, lo que la libera de la culpa de que todo se haya venido cuenta abajo; es una balada desgarradora que pinta la imagen incómoda de construirte a ti mismo alrededor de la validación que nunca termina. La melodía es plana, pero con una voz tan expresiva (literalmente suena como si estuviera al borde de las lágrimas en varios puntos) y líneas como «Ahora no quiero tu simpatía/solo me quiero de vuelta«, la canción continúa. como uno de los números más destacados del álbum.
El espíritu sarcástico regresa en «Happier«, una balada menos convencional en la que Olivia equilibra una línea de piano y cuerdas robustas para proclamar: «Espero que estés feliz, pero no estés más feliz«. Finalmente, Olivia nos dice que ha superado el duelo ¿y cómo lo hace? Ya no habla de él, pasa por completo en Jealousy, Jealousy y Hope ur ok, temas con los que además regresa a la dolorosa y complicada adoelscencia, hablando de temas como la baja autoestima, la ansiedad y las redes sociales, algo que probablemente ningún artista había explorado hasta ahora (“Compararme me está matando, creo que pienso demasiado en chicos que ni me conocen/estoy harta de ser yo misma, prefiero ser alguien más/los celos empiezan a seguirme”); y en la otra se centra en problemas familiares, una balada devastadora que encuentra a Olivia recordando a amigos que tuvieron que sobrevivir a las peores crueldades de sus propias familias. Nos devuelve a lo «brutal» y confirma que Olivia no está necesariamente obsesionada con las relaciones; está usando este romance como un microcosmos de la adolescencia para explorar cuán vibrantes e intensas son las emociones durante ese tiempo. Es brillante, por decir lo menos.
SOUR es un álbum muy sólido. Hay un amplio espacio para el crecimiento, particularmente en la composición de canciones de Olivia. El álbum deja mucho que desear en términos de escuchar a Olivia en canciones más rápidas como good 4 u o brutal, pero en las baladas su voz brilla con mucha fuerza. SOUR muestra con eficacia la amplitud de las influencias de Olivia (Taylor Swift, Paramore, St. Vincent, etc.), pero, en su mayor parte, ya ha encontrado su sonido y lo que la hace Olivia Rodrigo. A veces, el álbum se siente repetitivo y algunas de las nuevas pistas luchan a la sombra de los sencillos. Sin embargo, ya sea que se trate de un puente vibrante, capas vocales interesantes o un cambio peculiar en la estructura de la canción, Olivia encuentra la manera de hacer que cada canción sea parte integral del álbum completo.