A lo largo de nuestra vida nos vamos a encontrar con todo tipo de personas, las cuales nos dejarán un aprendizaje por terrible que pudiera haber sido nuestro encuentro con ellas. Porque sinceramente existen muchas personas con las que por diferencias de carácter, gustos, etc., no podemos llevarnos bien y otras que ni en su casa las toleran.
Si nos toca gente así en la escuela o el trabajo podemos evitarlas en la medida que sea posible y tratar de sobrellevarlo pero a la hora de iniciar una relación amorosa con alguien hay factores que no se deberían pasar por alto porque ¿de verdad es bueno estar con una persona a la que no soportamos y que ni siquiera nos hace felices?
Es cierto que por amor podemos aguantar algunas cosas e incluso aceptar los defectos de la pareja porque todos los tenemos pero hay límites. Claro que depende de cada quien qué tipo de persona le atraiga pero por salud emocional sería mejor que salieras huyendo si te topas a la siguiente clase de personas:
- Egoístas: Lo último en que piensan es en su pareja, solo les preocupa su propia felicidad y no les importará dañarte en el camino.
- Narcisistas: Se ven a sí mismos como el centro del universo. Tienden a sobre valorarse, sentirse superiores al resto y magnificar todo lo que hacen razón por la cual siempre exigen un trato especial de quienes los rodean aunque rara vez alguien puede cumplir con sus altas expectativas.
- Violentos: Ante cualquier situación recurren a la agresión ya sea física o verbal, no les importa dónde o con quien estén si algo les molesta explotarán sin medir las consecuencias.
- Infieles: No pueden estar con una sola pareja por mucho tiempo, generalmente son personas inseguras que necesitan tener varias parejas para sentirse atractivas o simplemente para no “aburrirse”.
- Controladores: Siempre quieren tener autoridad en como viste, sus amistades, los lugares a donde puede o no salir y el comportamiento en general de su pareja.
- Que no sepan escuchar: No les interesa lo que los demás quieran expresar, interrumpen al otro la mayor parte del tiempo y no son personas con las que puedas acudir para desahogarte o pedir un consejo porque probablemente no sabrán ni que fue lo que dijiste.
- Que no respeten ni a su propia familia: Una persona que se atreve a insultar y tratar mal a quienes le dieron la vida tarde o temprano lo hará con su pareja también.
Aquellos que tengan una o varias de estas características pueden convertirse en personas nocivas, porque es cierto que podemos mejorar como seres humanos o modificar ciertas conductas, pero son pocos los que están dispuestos a hacerlo y la realidad es que uno no cambia por completo.
Como dije anteriormente, depende de cada quien el estilo de vida que quiera llevar y lo que esté dispuesto a tolerar o no, pero lo que nadie debemos aceptar es estar en una relación con alguien que nos humille, no nos respete como individuos, nos haga sentir inferiores o menos que atente contra nuestra integridad física y emocional.
Una relación de pareja requiere de compromiso de ambas partes, confianza, amor y respeto, porque existen para darnos felicidad no para que vivamos en agonía constante.
«En cualquier relación de pareja que tengas, no te merece quien no te ame, y menos aún, quien te lastime. Y si alguien te hiere reiteradamente sin “mala intención”, puede que te merezca pero no le conviene a tu vida.» Walter Riso.
Samantha, me gustó mucho tu entrada; muy interesante y atinada. Muchas veces al estar enamorados, no se ve con claridad la realidad y en otras ocasiones hay personas que se resisten a reconocer que no son felices. Muy buenos puntos en tu artículo.
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