Desde su debut como director (Sex, lies and videotapes; 1989) Steven Soderbergh ha sabido impregnar su sello personal en todos sus trabajos sin caer...
Otro más.
Cuando eres niño aprendes que hay tres dimensiones:
Alto, ancho y profundidad.
Como una caja de zapatos.
Luego, escuchas que existe una cuarta dimensión: El tiempo.
Hmm......