Siempre que hay un clásico, los fanboys del mundo comienzan el famoso «Descenso de los Himalayas», salen de sus cuevas montañosas para brindarnos su sabiduría, preferiblemente por Twitter o Facebook.
Las redes sociales suelen abarrotarse antes, durante y después del famoso partido. Millones de aficionados comparten sus opiniones sobre el evento, tratan de predecir el resultado y, por supuesto, se insultan unos a otros por afirmar que Messi es un corrupto o que Cristiano gasta millones de euros anuales en peluquería.
«Vale cada centavo.»Sin embargo, muchas de esas disputas no tienen sentido y dejan de lado lo verdaderamente importante en el fútbol: los estilos de juego, las jugadas, los goles y los bloopers. A continuación menciono cinco ocurrencias de las que no se dan cuenta los obsesionados con enfrentar a estos delanteros con la pregunta ¿Quién es mejor, Cristiano Ronaldo o Messi?.
#5. Opacan a los demás jugadores
El fútbol es un deporte en donde es más importante el colectivo que el individuo, como nos enseñó la increíble película del 2005 Gol. En ella, el mejor jugador de la historia de México (real y ficticio) exceptuando al Chicharito, debe recorrer un largo camino para convertirse en futbolista profesional y poder disfrutar de esos jugosos euros que todos soñamos alcanzar. Lo que guía este largo camino es la madurez de Santiago; este debe aprender que, al dejar que su ego se funda con su equipo, será capaz de alcanzar su máximo potencial, lo que le permite al Newcastle clasificar a la Champions League.
Messi y Cristiano han entendido bien este mensaje, si no, no habrían llegado tan alto. Cada uno se muestra altruista en su forma de jugar, priorizando al colectivo sobre ellos mismos. Aunque el portugués a veces reclame a sus compañeros por falta de colaboración con él, suele preferir una victoria del equipo a su satisfacción personal. Y Messi incluso parece un mediocampista en varios partidos.
Lo que los fanáticos (y demás representantes del fútbol) muchas veces olvidan, es que estas discusiones sobre cuál de los dos es mejor, dejan de lado a toda una generación de jugadores que merecen ser representados. Por eso fue tan surreal que Cannavaro, un defensa central, ganara el balón de oro en el 2006. Desde entonces, solo ellos dos (a excepción de Kaká) han sido reconocidos por los premios internacionales. Arqueros, defensas y mediocampistas suelen ser dejados de lado.
Claro que el argentino y el portugués son considerados fuera de lo común, pero hasta Xavi e Iniesta perdieron contra Messi, luego de haber sido esenciales en la victoria de España en el mundial de Sudáfrica 2010.
#4. Olvidan la suerte que tienen
Nunca, en la larga historia del fútbol mundial, existieron dos jugadores de tanta calidad, jugando en la misma época, en la misma liga y, lo que lo hace todavía mejor, en los dos mejores equipos del mundo. Sería como si Pelé y Maradona se enfrentaran por lo menos, dos veces cada año, o como si los equipos de las estrellas en Fifa existieran en la vida real.
En vez de darse cuenta de esto, los fanboys prefieren investigar todos los datos posibles sobre ambas estrellas, para ver si encuentran alguna cifra que demuestre, de una vez por todas, la superioridad absoluta de alguno de los dos. Que si Messi tiene más balones de oro, que si las novias de Cristiano son más sensuales, que si los goles de Messi son más bonitos, que si Cristiano no se hace tatuajes porque quiere donar sangre a los niños de África y construir un hospital para cachorros con cáncer afectados por los terremotos de Indonesia, etc.
Es difícil notar alguna diferencia.Es indiscutible que Cristiano y Messi serán recordados como los mejores delanteros de la historia, entonces, ¿para qué tratar de enfrentarlos? Siempre existirán criterios diferentes para compararlos: el de más goles, o asistencias, u hospitales para cachorros; no es sensato tomar ese camino, nunca llegarán a una respuesta definitiva y, menos aún, satisfactoria.
#3. La diferencia de estilos
Un error bastante común que se comete en este tipo de discusiones es tratar de evaluar los estilos de juego de estos jugadores, sacándolos del contexto en los equipos en donde se encuentran.
El trabajo de un director técnico es garantizar un estilo de juego uniforme, para que cada futbolista no haga lo que le dé la gana, sino que siga una serie de parámetros que permitan al equipo seguir un objetivo claro a través de un método que los lleve a la victoria.
El equipo que tenga al Chicharito suele ganar la Champions.A pesar de esto, los simpatizantes del Madrid y el Barcelona eligen evaluar a sus jugadores estrella como si el fútbol se asemejara al tenis, en donde cada tenista es completamente responsable por el desarrollo de su juego.
Cristiano es criticado por no pasar el balón tanto como Messi, cuando el estilo de juego del Madrid es de ataque directo y contraataque; el del Barcelona es el que se caracteriza por la abundancia de pases. A su vez, los detractores del argentino afirman que el juego de este no es tan vistoso como el del portugués y que debería tomar más protagonismo, meter más goles espectaculares, etc.
Estas críticas no toman en cuenta que uno no tiene que imitar el estilo de otro, de hecho, sería aburrido si trataran de igualar sus técnicas de juego, mutuamente. El único lugar en donde Messi hace «la bicicleta» con las piernas es en Fifa.
#2. Hacen ver tontos a los demás aficionados
Es un hecho que el fútbol es el deporte más visto y más universal. No es coincidencia que tantos países se interesen por este; solo se necesita de un balón para jugarlo sin problemas, demás equipamiento no es tan necesario como en otras disciplinas.
Así, existen cientos de equipos, ligas, copas y rivalidades para disfrutar. La liga española es la más famosa actualmente. Al contar con varios equipos de calidad (temidos internacionalmente) compitiendo cada semana, los demás torneos suelen verse en un segundo plano, pero no por las razones apropiadas. Muchos fanáticos jóvenes no conocen más que al Barcelona y al Madrid. Esto es consecuencia de la gran atención dirigida a las disputas explosivas que pudieran ocurrir entre ellos.
Muchos aficionados más maduros, caen en el mismo juego y, para alguien que no conozca el deporte, pareciera que no existen más jugadores ni equipos de los que valga la pena hablar. Sin mencionar lo infantiles que se vuelven las comparaciones entre ambos, llegando a insultos personales y amenazas de muerte. Hay muchos otros equipos por los que amenazar a muerte a los contrarios, pero estos fanboys suelen enfocarse solo en Messi y Cristiano, debido a su limitado conocimiento sobre el tema.
De nuevo, para alguien seguidor de otros deportes, todo el conflicto debe representar la cara del fútbol mundial, haciéndolo ver muy simple e inmaduro.
#1 No existe rivalidad personal entre Messi y Cristiano
Mientras niños de 13 años de todo el mundo desenvainan sus cuchillos para arreglar sus diferencias con sangre, Messi y Cristiano van al cine y se toman algo por ahí; charlan sobre política, filosofía y temas similares. Y finalmente se burlan de todos nosotros por ser pobres y crédulos.
Claro que los tabloides hacen más dinero implicando que los dos futbolistas se odian como Mario y Bowser cuando, en realidad, ambos se respetan y reconocen que cada uno es mejor que otro en distintas facetas. Al igual que Mario y Bowser que olvidan sus diferencias en juegos como Mario Kart y Mario Party; en el único escenario en el que el argentino y el portugués verdaderamente se enfrentan es en el campo de juego.
De la misma manera, los medios trataban de enemistar a Guardiola y a Mourinho cuando eran técnicos del Barcelona y el Madrid, respectivamente. Como si fuera una sorpresa que el portugués se peleara con cualquiera que tenga cara; nunca fue personal.
Si ya han visto Batman v Superman, sabrán de lo que hablo. La película tuvo la mayor caída en audiencias, entre el primer fin de semana de estreno y el segundo, de toda la historia; y una de las razones fue que enfrentaron a dos amados personajes, sin razón, lo que hizo que todo el desarrollo se viera forzado y poco natural. Los fanboys cometen el mismo error con estos héroes futbolísticos; está bien disfrutar su juego, pasarla bien con sus jugadas y celebrar las victorias; pero crear una rivalidad inexistente para que los partidos sean más emocionantes…bueno, podrían ser candidatos a guionistas de la nueva película de DC: La Mamá de Superman v Alfred: No te metas con mi «hijo», probablemente.