La confidencialidad

El día de hoy se emitió un reportaje donde mencionan que los datos de todos los habitantes de México navegan por el internet como si nada, lo mismo de Argentina, Brasil y Chile, donde se puede encontrar desde la dirección particular, pasando por el teléfono particular y maravilla el número de folio del IFE, cabe destacar que esto no es nuevo y aunque suene escandaloso la población de la Ciudad de México sabe que en el mercado negro de Tepito se puede conseguir eso y muchas muchas cosas más.

Se ha denunciado infinidad de veces y la autoridad como siempre hace oídos sordos a peticiones de la población, en esta ocasión salió a la defensa y a la denuncia el órgano que en estricto sentido sólo tiene esa información (IFE), y muy indignado Lorenzo Córdova enfatizó que se realizaría una investigación ya que ellos y los partidos son los únicos que tienen acceso a esa información que navega impunemente en la “nube”.

Dado lo que sucede alrededor del mundo sobre el espionaje que realizó EE.UU. a países como Francia, Alemania, Brasil, México, y todos los demás que no se han dado cuenta cabe preguntarse en qué momento hemos dejado de preocuparnos por relevar aspectos tan íntimos de nuestra vida, hoy todo mundo se suscribe a FB, TW, LI, Y, M, y tantas otras redes en las que suelen poner sus datos personales y que son información sensible, que todas esas compañías se sienten dueñas de tal información, recordemos lo que sucedió con el “Milenario Millonario” Mark, el cual inmediatamente cambió sus políticas y es dueño de todo lo que se incluye en el “Cara Libro”.

La información personal que es divulgada a través de la nube es algo tan cotidiano que no sé si les resulte tan familiar como todos los robos, muertes, fallecidos, casos de injusticia, inexistencia de Derechos Humanos, políticos corruptos y ladrones de cuello blanco, rateros, sinvergüenzas, etc., etc., podría incluso hasta parecer que ellos han dado el consentimiento de que así sea.

Tal vez la sociedad, así como los países que fueron “espiados” (incluyendo Irán, Irak y Rusia, espiados por Brasil) deberían tomar en consideración que nadie es dueño de los datos plasmados en un documento de identificación oficial, del cual sólo se gastan una gran cantidad de presupuesto en “mejoras” y el cuál sólo sirve para hacer uso de “nuestro derecho al voto” para ver que las ratas siguen en su misma madriguera.

¿Cómo poder confiar en que nuestra seguridad está resguardada por las autoridades cuando los delincuentes cuentan con acceso a toda nuestra información’, ¿cómo poder agradecerle a los “poderes fácticos” que están haciendo un buen trabajo?, increíble pero cierto, lo único que hace la autoridad es lavarse las manos y sus citadas investigaciones que duran y duran y duran años sin que haya respuestas, y sin tengan un poco de respeto por la población puedan aceptar que no encuentran la respuesta.

No es concebible que tengamos que estar escuchando estupideces ni de Benito Nacif, ni mucho menos de Lorenzo Córdova que lo único que hacen es la misma tontería de siempre, excusarse; de que sirven los presupuestos asignados a estas instituciones cuando no se utiliza en lo que debería (o si estoy equivocado, no sucedería esto ¿correcto?), no hay modo ni forma de seguir esperando que algo suceda con estos pedazos de instituciones mal trechas y sin ningún sentido, y seguiremos por el mismo camino de la inmundicia.

Peculiaridad

La reelección pudo estar condicionada al “palomeo” al interior del partido político, increíble que estemos atrapados en épocas de Porfirio Díaz en pleno siglo XXI, y que no tengamos voz ni voto en todo lo que sucede alrededor del país, y estemos atrapados por la bola de ladrones que controla el gobierno federal.