En 2018, mientras se encontraba en Cannes como presidenta del famoso Festival de Cine, Cate Blanchett comentó que «Las redes sociales son fantásticas para concienciar a la gente de los problemas, pero no son ni juez ni jurado». Aunque hay mucha verdad en esta frase, algunos usuarios suelen olvidar lo primero y les fascina poner en práctica lo segundo. De hecho, juzgar a las personas en línea, tras un teclado y en muchas ocasiones bajo un pseudónimo se ha hecho tan común que dio paso a la cultura de la cancelación. Tras años señalando, acosando y burlándose de la personalidad de turno, hay que recordar que Rebecca Black fue la primera gran víctima de las redes sociales.
Ya han pasado diez años de aquel reprochable suceso pero alegra saber que justamente coincide con el regreso de la cantante. Este 16 de junio 2021 fue es el lanzamiento de Rebecca Black was here, su primer álbum en estudio y aprovechando este acontecimiento, queremos repasar ¿el ascenso?, ¿caída? pero sobre todo resurgimiento de Rebecca Black.
Todo comenzó un ‘FRIDAY’ para Rebecca Black
A lo largo de los años temas como We Built This City (de Starship), Barbie Girl (de Aqua) o She Bangs (de Ricky Martin) han sido catalogadas como algunas de las peores canciones de todos los tiempos. Lo que tienen en común estas canciones es que fueron estrenadas antes del nacimiento de las redes sociales, donde los malos comentarios del público se daban de boca a boca, entre amigos. Nacían y morían en una conversación.
En 2011, Twitter era la red social del momento, cada vez más famosos se sumaban a esta y por lo tanto, los seguidores estaban en un ascenso descomunal. El viernes 11 de marzo, se estrena el video musical de Friday de Rebecca Black en YouTube. En una semana pasó de las 3.000 a los 18.000.000 de reproducciones. Friday se convirtió en uno de los primeros vídeos virales de internet pero por las razones equivocadas. En el blog Tosh.0, Mike Pomranz publicó un post titulado » Songwriting isn’t for everyone (La composición musical no es para todos)» que también se hizo viral. Las personas reproducían y/o compartían el vídeo con sorna, para poder burlarse de la canción, los compositores y la cantante. Antes de que llegase el próximo viernes, Rebeca Black, quien apenas tenía 13 años, se había convertido en el hazmereír de las redes sociales, tuvo un inmerecido y excesivo bullying cibernético. FRIDAY fue descrita como «extraña», «inepta» y «espantosa».
¿Rebecca Black mereció todo el hate y las burlas que recibió?
Absolutamente no.
Cuando escuché la canción por primera vez fue en un reportaje en un noticiero de televisión nacional de mi país donde, sí, también se burlaban de la canción. Yo tenía 17 años y primera reacción fue también reírme. Apenas mostraron unos 30 segundos del vídeo, suficientes para revelar un concepto bastante trillado, una letra plana (pero bastante pegajosa, debo confesar) y la voz de una niña (Black) bastante nasal a causa del abuso del Auto-Tune. Pero tampoco era algo que no hubiese visto antes. Su música me recordaba a Baby de Justin Bieber y no es secreto que muchos hits musicales carecen de letras profundas (¿alguien ha escuchado Candyman de Christina Aguilera o Who Run the World de Beyoncé?).
Pero al mundo se le olvidó que no estábamos delante de una Diva del Pop, estábamos frente a una niña de 13 años que lo único que quería era abrirse camino en la industria musical. Y sin embargo, las personas no dejaban de escribir tuits como: «Nuevo juego de bebida. Bebe un trago cada vez que Rebecca Black apeste cantando Friday».
new drinking game! Drink every time Rebecca Black sucks at singing on Friday
— Temporarily OutOfOrder (@SameTho771) January 9, 2014
I want Rebecca Black to DIE! that was the WORST song I have EVER heard.
— Nigel Thornberry (@roninwayz) April 10, 2011
https://twitter.com/sho_hoe/status/51010027049320449
Otros comentarios fueron más reprochables, como aquellos que le desearon la muerte. Literalmente. «Quiero que Rebecca Black MUERA. Esa fue la PEOR canción que he escuchado» o «Rebecca Black debería simplemente morir en un hoyo. Su canción en terriblemente molesta«, escribieron otros.
Todo cambió para Rebecca Black
Seis años después del lanzamiento de FRIDAY, Rebecca Black escribió un artículo para NBCNews titulado «Lo que aprendí al convertirme en el centro de odio de internet con 13 años«.
En el mismo Rebecca comenta que antes de lanzar el vídeo ya era víctima de acoso escolar. «Grabé un video musical durante un receso escolar, solo para ayudarme a ganar algo de experiencia y divertirme» comenta. «…La avalancha de atención negativa que recibí fue tan repentina y tan intensa que no estaba segura de sobrevivir«.
En un minuto, Black pasó de ser una chica normal a ser conocida por millones de personas, quienes en su mayoría «fueron despiadados al lanzarme las palabras más viles. La gente escribía cosas en Internet, en las redes sociales y se reían de mí en los programas de televisión y se burlaban de mí en los videos de YouTube. Era temporada de caza y yo era la presa. El hecho de que hubiera un humano, una persona, una niña de 13 años, al otro lado de la pantalla, aparentemente no le importó a mucha gente.
Black recalca lo difícil que es ser una adolescente, y ella ya lo estaba viviendo. Se sentía «...confundida en cuanto a lo que es la vida y, por lo general, lucha por navegar por el mundo que nos rodea, ya que comenzamos a ser vistos como adultos, pero sin las emociones o la experiencia para manejar la edad adulta. Es tan desafiante estar a la altura de todos los requisitos que una sociedad enormemente exigente nos impone a las mujeres; actuar, lucir exquisita, ser divertida, inteligente, popular. Es simplemente demasiado; no fuimos creados para ser «perfectos» y no es justo exigir tanto a una niña«.
Aun siendo ya una adulta, Rebecca Black sigue sin entender el odio desmedido del que fue víctima «Nunca entenderé completamente cómo me convertí en una de las primeras personas en experimentar el acoso en línea de una manera extremadamente intensa. Pero ahora sé que lo que me sucedió es realmente solo una extensión global de algo que sucede en cada escuela, en cada pantalla de computadora y en cada vecindario».
Por último Rebeca se atrevió a analizar el uso y efecto de las redes sociales: «Las plataformas sociales realmente pueden deshumanizar a los objetivos del acoso en línea. Por ejemplo, una vez conocí a alguien que me había acosado en línea y me dijo en la cara que nunca había considerado que yo era en realidad un ser humano real, vivo y que respiraba. Sus acciones, dijo, se trataba de descargar su propia tristeza y apuntarla, de manera etérea, hacia mí. Casi puedo entender que a veces, cuando alguien está sufriendo, no es capaz de comprender el nivel de daño que está causando a los demás. Pero eso no excusa su comportamiento, simplemente explica dónde debe ocurrir el cambio.«
‘Rebecca Black was here‘… y ha regresado
Después de todo el acoso cibernético recibido, resulta tan admirable ver en lo que Rebecca Black se ha convertido. Utilizó todo el odio para crecer, madurar y convertirse en una mujer segura de sí misma. Después de un receso, se declaró queer el año pasado y en lo que va de 2021 ha lanzado tres singles: «Worth It For The Feeling«, «Girlfriend» y «Personal«, junto con su remix del décimo aniversario del éxito «Friday«.
Hablando sobre el lanzamiento de «Worth It For The Feeling«, Rebecca explica que ha sido importante para ella crear la mayor cantidad posible de un mundo distinto para cada single de su próximo proyecto. “Este año realmente ha sido una reintroducción no solo de dónde estoy en mi música, sino también de todo lo que rodea eso para crear una imagen completa”, comparte Rebecca. «Es muy divertido para mí jugar ‘a ser sexy’ de una manera menos convencional e inusual, y quiero seguir desafiándome a mí misma«.
Esta es una gran canción y continúa mostrando por qué Rebecca Black no debe ser infravalorada como artista. Atrás quedó esa adolescente de la que se burlaron en todo el mundo en Internet solo por dedicarle una canción al viernes.