Preacher es una nueva serie adaptada de la novela gráfica homónima que lleva el mismo nombre, finalizada en el año 2000 luego de 66 números, es considerada un cómic de culto. Tras varios intentos fallidos de películas “políticamente correctas” y pilotos rechazados, finalmente Preacher vuelve a ser recogida de los escombros que dejaron esas pobres adaptaciones, regresando a la pantalla chica principalmente por Seth Rogen como productor.
Ahora, sin enfocarnos en el tema del cómic ni hacer ningún tipo de comparación… hablemos de esta nueva propuesta como quien no conoce la cosa.
¿De qué trata la serie Preacher?
Haciendo a un lado la sinopsis y toda la historia de la novela, lo que podemos notar en el episodio piloto es que efectivamente se centra en un predicador ubicado actualmente en un pequeño pueblo de Texas, pero que a decir verdad no se trata de un cura común y corriente. Nuestro «religioso» protagonista tiene poco de eso, es una figura que definitivamente no obedece el rol que alguien esperaría de un predicador. Blasfemias, alcohol, cigarrillos, y más cosas mundanas están presentes en la vida de Jesse, además de un pasado —tal vez no demasiado lejano— que todavía lo persigue y lo tienta a regresar.
Como verán, el desarrollo de la trama en este primer vistazo estuvo un poco dispersa para ayudar a forjarnos una idea bien clara sobre el argumento, sin embargo, haciendo caso omiso del “no enfocarnos en el cómic” por un momento, desarrollemos un poco la idea con ayuda de esa trama ya conocida.
Jesse Custer —interpretado por Dominic Cooper— además de tener un conflicto entre la fe, su pasado, su padre, y la vida que lleva y aparenta actualmente, según la historia original Jesse es poseído por una criatura inivisible y sobrenatural que le otorgará el poder de ser literalmente obedecido por cualquiera que escuche su voz. Y junto a nuestro predicador protagonista se suman Tulip y Cassidy, —personajes igual de extravagantes que el propio concepto— los tres le darán rumbo al resto de la historia.
Como tal vez ya se habrán dado cuenta con sólo leer de qué va esta serie que involucra elementos sobrenaturales, religión, y hasta vampiros… podrán adivinar que Preacher puede ser una serie algo difícil de digerir para muchos, y es que definitivamente su argumento y narrativa no es para todo el público, manejando un notable humor negro y un estilo bastante agresivo. Pero apartando el singular concepto y su peculiar guión, sólo con su episodio piloto desde ya se jacta de una calidad visual con bastante nivel y una cinematografía muy destacada.
El explosivo e irreverente inicio de Preacher ha sido además una detonación de sangre y violencia que al parecer es un aspecto característico de la novela gráfica, y al que por supuesto se apegaron.
Preacher definitivamente será una serie poco convencional que no todo el mundo disfrutará, y aunque tal vez no convenza a todo el público, seguramente los fans la apreciaran y sabrán agradecer a los productores, o al menos hasta ahora todo apunta a eso.
Los números recolectados con su primer episodio fueron bastante satisfactorios, y todo indica que esta nueva serie de AMC —la cadena televisiva responsable de éxitos rotundos como Breaking Bad, The Walking Dead, o Mad Men— se ganará varios seguidores con esta nueva propuesta, pero ¿será suficiente para heredar el triunfo que dejaron aquellas series ya mencionadas? La verdad parece poco probable.