Invitando a leer…
Es una gran verdad que en México por alguna extraña razón la gente no gusta de leer, prefieren leer subtítulos a leer el libro completo, entonces me puse a pensar (y quiero aclarar que es una actividad que sí hago muy seguido) sobre cómo invitar a una persona a hojear un libro y por que no hasta leerlo.
Entonces después de mucho meditar llegué a la conclusión de usar el mismo método que cuando recomiendo un libro, leer en voz alta mi parte favorita del libro a la persona que se lo estoy recomendado a ver si se anima a leerlo.
Obviamente aquí no pueden oír mi poco melodiosa voz pero puedo compartirles una pequeño extracto de un libro en especial y ver si les gusta e invitarlos a leer. El cuento de hoy se titula Mensaje en una botella de Nicholas Sparks publicado en Libros Selectos de Reader´s Digest.
«Mi querida Catherine:
Como siempre , amor mío, te extraño, pero hoy me parece especialmente doloroso por que el mar me ha estado cantado y su canción es la de nuestra vida juntos. Casi puedo sentirte a mi lado mientras escribo esta carta y logro aspirar el aroma de flores silvestres que siempre me hace recordarte. Pero ahora todo eso no me provoca placer. Tus visitas son cada vez mas espaciadas y a veces tengo la impresión de que la mayor parte de lo que soy desapareciera lentamente.
Sin embargo intento sobrevivir . Al anochecer cuando estoy a solas, te llamo y cuando parece que mi dolor no puede ser mas grande, encuentras una manera de regresar a mi.
Anoche en mis sueños te vi el viento te alborotaba los cabellos y tenias los ojos brillantes por la luz del atardecer. Mientras te contemplaba pensando en lo hermosa que eras. Lentamente comenzase a caminar hacia ti y cuando al fin te volviste a verme, note que los demás también te habían estado observando.
¿Acaso la conoces? ; me preguntaron con un celoso susurro, y mientras tu me sonreías respondí la pura verdad: “Mejor que a mi propio corazón”
Me detuve hasta llegar a ti, te toque con suavidad la mejilla y tu inclinaste la cabeza y cerraste los ojos. Luego como siempre volvió a aparecer una niebla lenta que envolvió el mundo a nuestro alrededor, rodeándonos como si tratara de evitar que escaparamos. Como una nube que se expande y lo cubre todo fue cerrándose hasta que solo quedamos tu y yo. La mirada que me dirigías en ese momento me persigue, siento tu tristeza y mi soledad. Y luego abres los brazos y das un paso atrás en la niebla, por que ese es tu sitio y no el mío. Anhelo ir contigo pero tu única respuesta es negar con la cabeza por que los dos sabemos que eso es imposible, y observo con el corazón destrozado mientras te desvaneces poco a poco.
Me encuentro esforzándome por recordar cada uno de los detalles de ese momento, cada detalle de ti. Pero pronto, siempre demasiado pronto, tu imagen desaparece y me quedo solo en el muelle y sin importar lo que otros piensen, inclino la cabeza y lloro, mucho, mucho.»
Espero llame su atención lo suficiente para que busquen el libro o me lo pidan prestado.
Imagen tomada de http://unavidadeexperiencia.blogspot.mx/2013/03/mensaje-en-una-botella.html