Es de noche, se siente una pequeña brisa en el rostro, la tierra húmeda y resbaladiza, el aire limpio llena los pulmones cada que vez que respiras, escuchas cómo pasa el viento entre los árboles, ver moverse las ramas con toso y sus hojas en una armonía propia de la naturaleza.
Se ve, se siente la obscuridad y de repente unas luces amarillas comienzan a parpadear, arriba en los árboles, abajo en los arbustos se unen en el centro; entre el cielo y la tierra, el espectáculo comienza las luciérnagas bailan alumbradas por su propia luz, se cortejan y conquistan listas para el momento en que se unan los ellos con las ellas y entonces brillan con tanta fuerza que parecen foquitos leds.
La obscuridad las cubre con su manto en Nanacamilpa, (delante de Calpulalpan, Tlaxcala) y ellas brillan como leds propios de la naturaleza, un espectáculo natural que asombra a cuanto lo presencian.
Por la mañana se puede ver un hermoso cielo azul despejado y unas hermosas nubes blancas que bailan al ritmo del viento, todo contemplando desde unas hamacas metálicas completas a la orilla de una laguna.
Y todo este maravilloso espectáculo está a tan sólo una hora y media del DF (manejando como maneja mi madre su RAV4 por la libre), les recomiendo ampliamente hospedarse en “Laguna Azul” (7487661225) tiene los servicios básicos y comida casera riquísima.
Es una experiencia natural que sólo se puede vivir en los meses de Julio y Agosto, altamente recomendable.
Foto: Tomada por la autora del articulo.