Inicio Aprende de Noticias Crónica de una cruda anunciada

Crónica de una cruda anunciada

Me despido de todos y, aunque los veo borrosos, sigo sonriendo para ocultar que mi borrachera sobrepasó mis propios límites.

Como puedo me subo al auto de mi amiga, quien por suerte no tomó esa noche y, de verdad no sé cómo me bajé del auto y llegué a la puerta de mi casa. Subo despacio y entre mi cama y yo sólo nos estorban unos pasos, como puedo llego a ella y me aviento sin saber más de mí, en un principio siento como se mueve todo, pero pronto dejo de sentirlo.

¿Qué está pasando? Todo me da vueltas, abro un ojo y compruebo lo que me temía: ya es de día, el sol entra tan fuerte, como si supiera lo que pasó la noche anterior, no puedo abrir los ojos, esperen no puedo ni levantarme ¿qué rayos es esto? Como puedo tomo fuerza y me levanto. Me siento tan incómoda. Como puedo voy al baño y, al verme al espejo: ¡horror! Me encuentro cara a cara con un integrante del grupo Kiss, combinado con un payaso puesto en el sol, estoy hecha una piltrafa humana; abro la regadera e intento entrar, aunque titubeo un poco, ya adentro todo empieza a tomar un poco de sentido, la fiesta, los tragos, los amigos y mi… esperen, ¿y mi celular? Un pánico comienza a recorrerme y termino rápidamente de darme ese baño, que tanta falta me hacía, corro a mi cuarto abro mi bolsa y ahí está, sin batería, claro, y juro que nunca se me hizo tan largo el reinicio de estos tontos aparatos… y mi mente pensando: ¡prende ahora!, hasta que lo hace y voy hacia llamadas: dos hechas esa noche, mensajes: cuatro al mismo número, no les diré que sentí porque creo que varios lo hemos sentido y por favor no me hagan pensar que soy la única.

Bajo a desayunar pensando ¿cómo voy a explicar todas las tonterías que hice y dije a noche? Y, ¡sorpresa!, mi estómago revuelto lo único que quiere es agua, el refrigerador está ahí, voy hacia él, mi vaso con agua fría ya en mi mano, esperen, algo me dijeron sobre el agua en la cruda, que rayos, yo no estoy cruda ¿o sí? Veo la hora y es tarde tengo que ir a la universidad.

No soporto mi cabeza, tantas cosas que pasaron, tan mal que me siento, pero soy fuerte y puedo pasar por esto. Llego a la entrada de la universidad y entro esperando ver la mirada incriminatoria de todos hacia mí, cuando los veo, todos parecemos sacados de una película de zombies; eso me tranquiliza y, sin más remedio, tendremos que ir a curar esta maldita cruda.

Pero ahora sí, ¡juro que no lo vuelvo a hacer!

Con cariño Yessi “Cherry” Meza
xoxo

El Staff de NeoStuff está formado por una docena de integrantes capaces de escribir sobre todas las temáticas que encuentras en la revista. También nos encargamos de contestar todas tus dudas lo más rápido posible

1 COMENTARIO

DEJA UNA RESPUESTA

Por favor ingrese su comentario!
Por favor ingrese su nombre aquí

Salir de la versión móvil