“Agradece que tienes trabajo”, una memorable frase que he escuchado muchas veces y que tengo que aceptar que he dicho algunas otras, pero qué tal si es un trabajo al que no se le puede agradecer nada, más que el simple hecho de recibir algo de dinero pero que a cambio hay que entregarle los mejores años de la vida, un poco de neuronas y muchas horas diarias de tortuoso malestar por saber que hay una clara violación de los derechos laborales del trabajador.
Es común encontrar empresas que cometen toda clase de abusos sabiendo que el trabajador las va a aceptar porque necesita el trabajo, la bendición de trabajar. Hay una larga lista de violaciones de los derechos del trabajador:
Contrato laboral inexistente
Las empresas prefieren omitir este paso para evitar tener la menor cantidad de documentos que los vinculen al trabajador ante alguna demanda o exigencia laboral, muchas otras tienen un contrato pero no le entregan al trabajador su respectiva copia, también sucede que muchas ellas se los hacen firmar en blanco o con espacios vacío que pueden ser llenados a conveniencia del patrón, todo con la finalidad de que el trabajador tenga la menor cantidad de armas para defender sus derechos.
Contratos por tiempos determinados
Este tipo de contratos son los que se otorgan al trabajador por cierto tiempo, una vez terminado el tiempo especificado se termina la relación laboral, se pagan al trabajador partes proporcionales de las prestaciones de ley, se firma una renuncia y un nuevo contrato por tiempo determinado, cuando éste se termina, se repite la historia sucesivamente, todo con la finalidad de evitar que el trabajador genere antigüedad para vacaciones, aguinaldo, primas de antigüedad en caso de indemnización y que sea fácil prescindir de él.
Firma de documentos ventajosos para la empresa
Cuando se ingresa a trabajar es sabido que hay una serie de documentos que se deben firmar, contrato, reglamentos de trabajo, métricas, entre otras, variando según la empresa, pero hay algunas que prefieren agregar algunos otros que les puedan resultar ventajosos: hojas en blanco, pagarés, renuncia voluntaria y recibos de nómina, todos ellos con el fin de intimidar al trabajador en caso de querer hacer valer sus derechos. Al trabajador que se niegue a firmar estos documentos se le negará el trabajo por no apegarse a las “políticas” de la empresa.
Jornada de trabajo excesiva
Muchos de los patrones obligan a sus trabajadores a laborar horas extra sin remuneración escudados en el hecho de que son trabajadores de confianza, cuando ni el patrón mismo sabe definir qué es un trabajador de confianza y cuáles son sus funciones. Pero igual pasa con todo tipo de empleados, se les obliga a trabajar horas extras, si se niega a trabajarlas será despedido y se le buscará un reemplazo que acepte las condiciones, que desee ser bendecido con un trabajo. Igualmente sucede con el trabajo en días feriados, el trabajador no tiene la obligación de trabajar esos días, pero si se niega será sancionado.
Impedimentos para tomar vacaciones
Seis días de vacaciones del primer año, aumenta dos por año hasta llegar a doce días, a partir de ahí aumentan dos por cada 5 años, así lo dice la ley, pero muchas empresas impiden a sus trabajadores tomar la totalidad de los días correspondientes o tomarlos cuando ellos lo desean, el trabajador termina tomando la cantidad de días en las fechas que el patrón quiere, esto en el mejor de los casos, muchas ocasiones ni eso se les permite.
Negación de reparto de utilidades
Hay una infinidad de artimañas que las empresas usan para declarar que en el año fiscal no tuvieron ganancias, para evitar con ellos muchas cosas, por ejemplo el reparto de utilidades a sus trabajadores. Otra forma en que se comete abuso en el reparto de utilidades es cuando llega a haberlo, se exceden en el tiempo para la entrega, aplazándolo meses, situación que también está contra la ley, una forma más de actuar en este aspecto es dando utilidades, pero una cantidad muy inferior a la que por ley corresponde, disfrazando ésta de “compensación”. Muchos trabajadores evitan hablar de ese tema debido al temor a represalias.
Centro laboral inapropiado
No existen las condiciones adecuadas para desempeñar el trabajo, condiciones en las que el frío o el calor son preponderantes, zonas de trabajo que ponen en riesgo la salud del trabajador, equipo de seguridad inexistente o carente, así como equipo viejo o sin mantenimiento que en cualquier momento puede fallar y provocar un accidente. De igual forma las herramientas de trabajo que se tienen son pocas o ya tienen una vida muy extensa lo que dificulta el trabajo y hace que el esfuerzo sea mayor.
Sin prestaciones de ley
No hay IMSS, simplemente por ahorrarse las empresas no dan de alta al trabajador en la institución dejando la salud de él de lado, otra forma de actuar es registrarlo con un salario menor al real, con lo que el pago de las cuotas patronales disminuye considerablemente. Esto no sólo repercute a corto plazo en no recibir la atención médica, la cual ya es deficiente, sino también a largo plazo en la posibilidad de la adquisición de una vivienda por medio de crédito Infonavit y en la cantidad de dinero ahorrado en la Afore y que se recibirá al momento de la jubilación.
Estas son sólo algunas de las violaciones a los derechos del trabajador que se cometen, mismos que no pueden ser frenadas debido a la intimidación que la empresas ejercen, no sólo con un despido, también con la amenaza de brindar malas referencias del trabajador a la hora de su salida lo cual mermaría la posibilidad de un nuevo trabajo. En México aún vemos mal el hecho de exigir los derechos laborales ante la Junta de Conciliación y Arbitraje, lo que genera en automático un antecedente negativo. Sin duda condiciones de trabajo difíciles para la población.
Por: Josué González
Twitter: @joss_gonzalez